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Tu facebook será cerrado y para abrirlo tendrás que pagar…Noticias falsas en Aumento

  • Javier López Casarín
  • 15 jun 2019
  • 3 Min. de lectura

Cada día es más difícil determinar lo que es verdad o fantasía en las redes sociales. Hoy en día sin duda alguna el culpable principal sería el algoritmo de Facebook, ya que la responsabilidad de amplificar un contenido recae en la red social y no en quien crea el contenido.


Si volteamos hacia atrás, hace aproximadamente un año y medio la fórmula para “triunfar” en las redes sociales era sencilla. Por unos cuantos dólares o con un esfuerzo relativamente sencillo se podía adquirir una fuente muy grande de fans o seguidores. Bastaba con tener algunos millones de éstos combinado con un copy atractivo y algunas imágenes visualmente atractivas para que se hiciera viral. Esto ocasionó en el transcurso de mucho años que las redes sociales se inundaran de contenido falso o contenido sin valor. A raíz de presión por parte de los medios más importantes tradicionales en Estados Unidos se obligó a Facebook a mejorar la calidad del contenido. La alternativa del gigante azul se redujo a modificar el algoritmo de amplificación y sus reglas para que solo se amplificara contenido de relevancia. No confundamos esto con contenido de calidad, la calidad es subjetiva y su apreciación depende de los ojos que lo evalúan, por el contrario la relevancia no lo es y en términos de Facebook un post es relevante si genera interacción aún cuando esta interacción pueda ser negativa.


Hoy en día el contenido que se amplifica es aquel capaz de generar interacciones. Si esto sucede la red social distribuye el contenido a las masas y premia al medio con un costo por click más bajo para poder amplificarlo aún más. Sin embargo, esto no evita que existan noticias falsas, al contrario, de alguna manera u otra las fomenta puesto que la naturaleza de las noticias falsas se basa en ser disruptivas y la disrupción genera interacción. Por lo que podemos deducir, que un buen intento de Facebook para fomentar el contenido de calidad en la red generó simultáneamente mayor contenido falso.


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El reto hacia adelante para cualquier medio de distribución de contenido será identificar las fuentes de contenido falso. Esta no es una labor sencilla. En la actualidad, investigadores de MIT han creado sistemas de detección de noticias falsas a través del uso de modelos de machine learning o mejor conocido Inteligencia Artificial que puedan entender las sutiles pero consistentes diferencias en el lenguaje que se aplica en las historias verdaderas y las falsas. Sin embargo, como cualquier modelo de inteligencia artificial estos se deben de entrenar para generar precisión. En un proceso en donde la máquina califica, el humano verifica y corrige para que posteriormente la máquina aprenda y se perfeccione. Estos modelos identifican grupos de palabras con alta tendencia a aparecer de forma frecuente en noticias verdaderas y falsas. Algunas de estas son muy obvias, otras para nada lo son. Los resultados encontrados en este tipo de investigaciones, apuntan a una sutil pero consistente diferencia en la elaboración de las noticias falsas, que tienden a usar exageraciones y superlativos versus al lenguaje en noticias verdaderas que se inclinan al uso de palabras conservadoras.


En el primer capítulo de mi libro, “Innovación una Actitud” estimo que para el año 2022 la mayoría de las personas en las economías maduras consumirán más información falsa que verdadera. Esto implica un gran problema para los anunciantes digitales y empresas como facebook y google que atraviesan una crisis de confianza precisamente debido al aumento de fuentes falsas de información. Las noticias falsas significan una amenaza para la democracia y para la población y es importante ser conscientes de lo que implica tener información falsa y la gran importancia del uso de fuentes fidedignas.



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